En el esperado cónclave entre Omar Perotti y el principal líder de la oposición, Miguel Lifschitz y legisladores del bloque frentista, los temas de estricta agenda coparon el diálogo: "Fue una reunión fría, distante y formal", la describió un diputado provincial, al término de la cita, de la cual también participaron los Ministros Walter Agosto (de Hacienda), de Gestión Pública, Rubén Michlig y de Gobierno, Esteban Borgonovo.

Todos con estricto rigor técnico abordaron los aspectos de coyuntura que habían sido prefijados y que sirvieron, en parte, para que el gabinete de Perotti hiciera una suerte de informe de gestión a su antecesor y sus pares. Vicentín, situación de Municipios y Comunas, transporte público y Seguridad, mientras se dedicó un párrafo al conflicto con el servicio de recolección de basura en la Capital provincial.

Antes de la reunión, todo el microclima político se vio sacudido por un audio del Ministro de Seguridad de la Provincia, Marcelo Saín, donde hablaba acerca de una supuesta operación mediática en contra de su persona por parte del mismísimo Gobernador. Aunque luego salió a aclarar que se trataba de una humorada, las nuevas declaraciones altisonantes del titular de Seguridad no cayeron bien en el círculo íntimo de Perotti ni en la oposición.

"Saín debería ponerse a pensar en cómo bajar la ola de homicidios en Santa Fe y en Rosario e incluso en cómo mejorar la seguridad en las zonas rurales. No en hacer un show mediático para ganar espacios en la prensa. El único resultado que logró hasta ahora es ostentar ser el Ministro con mayor cantidad de homicidios durante un semestre en los últimos 4 años", se quejó un Senador justicialista, en diálogo con LPO. Todos los consultados confirmaron que durante la reunión ni siquiera se nombró al funcionario.

Por su parte, Perotti aludió a la situación financiera de la Provincia e hizo hincapié en la caída de los recursos, una información que luego brindó pormenorizadamente a los integrantes del Frente. El mandatario, quien mantiene días de extensos diálogos con todos los sectores partidarios, aseveró que "la política debe estar a la altura de los esfuerzos y sacrificios que todos los santafesinos están haciendo". "No hay margen para mezquindades ni tironeos", subrayó.

Su Ministro de Hacienda, Walter Agosto, fue quien anotició a los diputados acerca de las diezmadas arcas provinciales: Santa Fe dejó de percibir 15000 millones en tiempos de pandemia. "La caja está flaca", admitió el peronismo. Michlig y Borgonovo, de Gestión Pública y Gobierno respectivamente, argumentaron que la política de asistencia social de la gestión se encolumnaba detrás del plan covid-19. "Vinimos a escuchar y no a bajarle línea al Gobierno de cómo gastar ni gobernar. Coincidimos en que son tiempos duros para todos", consignó un allegado a Lifschitz.

Aunque se especuló con la presencia de los alcaldes de Santa Fe Emilio Jatón y de Rosario, Pablo Javkin, ninguno de los dos participó de la cumbre. Para muchos, se trató de un gesto político que intentó desalentar rumores sobre el acercamiento de los intendentes a la gestión provincial. Sí estuvieron los legisladores Mónica Peralta, Ariel Bermúdez, de Creo, Gabriel Real, el Senador radical Felipe Michlig y el ex intendente santotomesino Fabián Palo Oliver. Tampoco participó el Ministro de Seguridad saliente, Maximiliano Pullaro.